Parece una pregunta simple, pero es más complejo de lo que parece, en teoría nadie lo sabe. Si hay que decir el nombre de una persona que las haya inventado es muy difícil. Los idiomas han ido evolucionando incluso ahora también lo hacen y es posible que por «moda» otras palabras se unan a nuestro diccionario o se acepten otra forma de decirlas.
¿Quién invento los idiomas según la mitología y religiones?
Según las historias bíblicas, Dios le pidió a Adán que nombrara a todas las criaturas del mundo. Todos en el mundo estaban tan contentos hablando el mismo idioma que se propusieron hacer un proyecto en común: una torresota en Babel. A Dios no le gustó la idea y confundió todas las lenguas.
Según la mitología nórdica los tres hijos del dios Borr hicieron a las primeras personas con la madera de dos árboles que se encontraron. El primer dios les dio espíritu, el segundo sentimientos, y el tercero, el habla.
Para los Bantúes, en África, todos los idiomas surgieron una vez que la gente pasó por una hambruna tan terrible que empezaron a hablar. Y de esas palabras surgieron las lenguas.
Origen de los idiomas
Es muy difícil saber cuando se comenzó hablar de tal modo que las palabras tuvieran algún sentido para otra persona, es decir, que tanto el emisor como el receptor entiendan el mensaje. Aunque de la escritura es un poco más sencillo encontrar el origen, porque sí queda un registro físico. Lo primero que escribieron los seres humanos no fueron sonidos, sino números.
La escritura de palabras empezó en el año 3200 a.C en Mesopotamia, y fue la famosa escritura cuneiforme, cuyos rasgos parecían pequeñas cuñas. Los egipcios también desarrollaron su lenguaje a través de los jeroglíficos, donde a través de «dibujar» animales u objetos podían transmitir un mensaje. Incluso si nos remontamos a la prehistoria lo que aquellas personas dibujaban en las cavernas eran una especie de diario.
Poco a poco otras culturas tomaron estas formas para desarrollar su propio lenguaje, comenzaron hacer modificaciones para simplificar su escritura. Hasta tal punto que algunas de estas formas dejaron de perder su verdadero significado y para especificar una cosa deberías de hacer un conjunto de estas nuevas letras. La escritura de todas las letras del abecedario tiene una historia que se puede rastrear miles de años atrás.
¿Cuándo los humanos comenzaron a hablar?
Es evidente que fue mucho antes de la escritura, pero no hay evidencia física. Los lingüistas no se ponen de acuerdo y existen dos ideas principales.
Unos dicen que, como en la historia de Babel, originalmente había una sola lengua madre (el Idioma protosapiens), y conforme los pueblos se fueron dispersando, las lenguas se fueron diversificando. La otra idea es que las primeras lenguas fueron desarrolladas mucho después de que la civilización se fuera de África y se expandiera por todo el planeta y cada uno se desarrolló de forma distinta y en tiempos diferentes.
¿Y su origen?
La teoría más posible es que la lengua surgió a partir de las señas que hacían nuestros ancestros, parecidas a las que hacen los primates para comunicarse. Tanto los simios como nosotros movemos la boca y emitimos sonidos al mover las manos. Esta idea se refuerza por el hecho de que las “neuronas espejo” de nuestro cerebro, relacionadas con la imitación y el aprendizaje se encuentran también en el área de Broca, una de las áreas más importantes para poder hablar.
Esto va reforzado por una necesidad de socializar de entrar en contacto con otras personas, grupos o tribus. Una forma de ayudarse y colaborar entendiéndose. Claro que esto no fue un proceso sencillo se tardo miles de años en tener un lenguaje entendible para una gran comunidad. No tenemos que conscientemente saber esas reglas para aprender a hablar, la estructura básica de la lengua tenía que ser biológica, no aprendida,
sino heredada genéticamente.